Nuestro último trabajo ha consistido en la reforma integral de una planta baja con más de 50 años de antigüedad en la que hemos cuidado cada detalle. En la cocina hemos optado por colocar muebles blancos, brillantes, para que den luminosidad y a la vez una sensación de mayor amplitud y limpieza. La encimera, al igual que la placa de la isla, se ha hecho con una imitación estética a mármol blanco (aunque la foto sea general se pueden apreciar las vetas en un gris pálido). Para mantener la misma gamma cromática es perfecto combinar estos materiales con con el acero inoxidable de las sillas y de los electrodomésticos. El resto de la cocina se ha hecho en Neolith, concretamente con placas clase «Estuario».
Para encerrar el baño hemos querido poner una puerta corredera semitransparente, una opción interesante para dar un aspecto moderno y de espacios diáfanos a la estancia en general.
Así, hemos seguido empleando la misma gama de colores en blancos y grises en materiales y en objetos de decoración. Por ejemplo, el radiador toallero del baño está en gris, también los apliques de los enchufes y hasta el interruptor de la cadena del baño, el aspecto es bastante elegante de hecho.
